Poder tomar la medicación que necesitas puede parecer evidente. Pero en demasiadas regiones del mundo sigue siendo tarea imposible. A veces, curarse no es solo cosa de medicinas. Pero empezar por ese primer paso, puede ser determinante.
En Anesvad garantizamos el acceso a servicios de salud esenciales. No solo a medicamentos eficaces, si no también a asequibles y de calidad para todas las personas de los contextos en los que trabajamos. En zonas remotas de Benín, Togo, Costa de Marfil y Benín, la población afectada por enfermedades olvidadas sufren. En muchas ocasiones por nos saber que pueden acceder a medicamentos y, en otras, por no poder hacerlo.
Es por esto que trabajamos la sensibilización y la información sobre cuestiones relacionadas con la salud. Para que las personas en situación de mayor vulnerabilidad sepan que están enfermas y conozcan que además de las buenas prácticas de higiene, la medicación puede, en ocasiones paliar su sufrimiento, y en otras, curarles del todo.
Además, en Anesvad, tratamos de acercar la atención a las comunidades más alejadas. Buscamos así que las personas no tengan que desplazarse ni incurrir en gastos para poder ser atendidas. De esta manera, trabajamos con las postas de salud más cercanas a las comunidades y dotamos a esas pequeñas infraestructuras de medicamentos, agua y luz en muchos casos, además de formar a su personal. Junto con todas las personas que trabajan como voluntarias comunitarias, buscamos minimizar las consecuencias extremas que conllevan estas enfermedades como las deformidades y el estigma que se asocia a las mismas.
Por eso, no son solo pastillas, no son solo medicamentos, son mucho más.