Una enfermedad endémica ocurre en una zona o región geográfica concreta. Con la globalización, vemos un auge de brotes en países donde tradicionalmente estas enfermedades no ocurrían, como es el caso de la viruela del mono.
Ébola, malaria, viruela del mono. Todas estas enfermedades ocurren en países de climas tropicales y en contextos empobrecidos. Son, por lo tanto, endémicas de estos países. Pero, ¿podrían dejar de serlo a causa del movimiento de su población a nivel global? ¿O por los efectos del cambio climático?
¿Qué es una enfermedad endémica?
Una enfermedad es endémica cuando está presente de forma constante pero limitada a una región concreta. Esto hace que la propagación y las tasas de la enfermedad sean predecibles, y se circunscriban a esa región en concreto. La malaria, por ejemplo, se considera endémica en determinados países y regiones tropicales, y en Europa apenas se daban casos en el sur, por lo que no se considera endémica del continente.
Las enfermedades endémicas no siempre están presentes en niveles elevados. Pueden incluso ser relativamente raras, como la viruela del mono. La característica que define a una enfermedad endémica regional es que siempre puede encontrarse en la población que vive allí.
Cuando las enfermedades viajan a países no-endémicos
En los últimos años hemos visto como, a raíz de los cambios en las temperaturas y la degradación de los ecosistemas, algunas enfermedades se han adaptado para alcanzar nuevos territorios. El movimiento de personas a escala global también contribuye a la propagación de enfermedades a países no-endémicos.
Lo hemos vivido con la COVID-19 y ahora con la viruela del mono, que desde mayo del 2022 ha producido contagios en 21 países de Europa. Esta zoonosis se trasmitía solamente en zonas remotas del centro y oeste de África. Ahora, se han dado más de 1600 casos fuera de África, con contagios entre personas infectadas por contacto directo de fluidos.
Y es que este tipo de trasmisiones inusuales está aumentando. Debemos pensar que la salud global está interconectada, y que la lucha contra las enfermedades infecciosas debería ser un esfuerzo global.